CRÓNICAS DEL SALVAJE OESTEQue nuestro general Custer-Bermejo es un superviviente nato, es indudable. ¿Alguien daba dos centavos por él tras la huelga de los indios funcioneros? Pues ahí lo tenemos nuevamente cabalgando a través de las verdes praderas con el sable desenvainado; pidiendo sangre (formando coro con la gran cazadora de búfalos Vice De la Vega) al Consejo Tribal como un energúmeno y, cual Salomé bailona, exhibiendo atada a su silla de montar la cabeza de una Secretaria Judicial. Y todo para intentar escurrir nuevamente el bulto, difuminando su responsabilidad en el actual marasmo y ocultar su nefasta gestión al frente del Bureau of Indian Affaires.
Los salvajes funcioneros ya intentaron que el pánfilo de ZP le diera puerta, pero no hubo manera. Veremos qué pasa ahora que en los profundos valles vuelven a resonar los tambores ceremoniales de guerra y en las altas colinas se vislumbran innumerables señales de humo que llaman a la rebelión.
Si en su anterior campaña de exterminio el General no logró vencer a la tribu de los
funcioneros, pese a contar con la ayuda en el último momento de un par de
chamanes sindicaleros renegados, al menos consiguió mantener la confianza del gran Jefe Blanco. De forma inesperada, eso sí, pero está claro que a él no le han puesto al mando del
Séptimo de Caballería y nombrado jefazo de facto del
Far West Judicial para arreglar desconchones y repartir estampitas. Un guerrero tan
sectario y prepotente está para repartir estopa y descabezar a todos los grupos indígenas, colocando en su lugar a gente sumisa y obediente a los dictados del hombre blanco.
En esta ocasión, una gran coalición de naciones indias, liderados por los poderosos clanes de
los puñetas y
los doyfe, exhiben sus togas de guerra y se aprestan a cortar cabelleras. Incluso los
puñetas JPD, normalmente satisfechos con el agua de fuego y abalorios que les proporciona el
Gran Jefe Broncas Apoltronado (nombre con el que designan al General) han emitido un duro comunicado pidiendo su despellejamiento ritual.

Que
los doyfe se encontraban molestos por diversos asuntos con el
Jefe de los Cuchillos Largos, no es ningún secreto. Pero la última incursión de castigo contra uno de sus poblados situado en las orillas del rio Pecos (también conocido por Guadalquivir), parece que ha acabado con su paciencia, Y así, han convocado a todos sus guerreros a
una sentada de traseros durante tres horas, el próximo día 21. Por cierto que la
horda funcionera de la reserva hispalense, normalmente enfrentados a aquellos por algunos asuntos de pieles de castores, están planeando fumar la pipa de la paz y unirse a la culonada ritual.
Respecto a
los puñetas, sin duda la más poderosa e influyente de las
etnias judicieras, hartos sin duda de las bravatas cuarteleras del General y el empeño de este en castigar ejemplarmente a uno se sus miembros llamado
Mapache Arrojado (les pide, en esencia, que sea enterrado hasta el cuello en la arena, a ser posible junto a un hormiguero, y con la cabeza bien untada en miel), han decidido convocar
juntas tribales de jueces ese mismo día. (¡Qué astutos!, así pueden adherirse a la
danza de la lluvia, pero sin convocarla oficialmente, ya que hay dudas de sí en los tratados se contempla tal posibilidad)
¿Estamos ante el principio del fin? ¿Le habrá llegado por fin al prepotente
Custer-Bermejo su
Little Big Horn? ¿Le veremos rodeado de cadáveres y sujetando la bandera sectaria, mientras el gran jefe indio
Magistrado Loco le arranca lentamente la cabellera?...
Seguiremos informando.
***************************
DE LANGOSTAS Y CRISIS
Ha causado alarma en sectores ecologistas el Decreto aprobado por el Gobierno para inyectar 30.000 (o 50.000 o 100.000) millones de Euros en el Sector Bancario. Y esto es asi, por las graves consecuencias que tal aportación dineraria puede tener para la, ya difícil, supervivencia de determinadas especies muy apreciadas en restaurantes de lujo.
Y es comprensible la inquietud. Si en los hábitats políticos y económicos, los individuos situados en la cúspide de la pirámide alimenticia no se cortaban un pelo a la hora de depredar los escasos recursos disponibles, utilizando para ello sus afiladas tarjetas de crédito institucionales o mediante la técnica de la emboscada en restaurantes y puticlubs de alto standing, supuestos asesores, gastos de representación y demás comportamientos instintivos ¿Qué no harán ahora que a sus finos olfatos de carnívoros les llega el suculento olor de BILLONES DE LAS ANTIGUAS PESETAS?
Sabemos que es delicado poner en solfa alguna de las ocurrencias de ese Dios sobre la Tierra que es ZP y sus iluminados discípulos, pero nos arriesgaremos a ser inmediatamente estigmatizados como unos cavernícolas fascistoides o ser unos inmundos lacayos al servicio del PP.
Dado que nuestros conocimientos sobre economía global, flujos bancarios y demás disciplinas del tiburoneo financiero, no va más allá de una cierta habilidad en separar la pelusilla de las monedas que llevamos en el bolsillo, no ponemos en duda la necesidad e idoneidad de las medidas adoptadas. Pero resulta llamativo que los mismos que durante meses han negado por activa o por pasiva la existencia de una crisis y observaban con delectación sus esferoidales ombligos, se conviertan de forma sorprendente, o más bien obscena, en adalides de la recuperación económica.
Para nosotros, esta actitud solo puede responder a uno de estos tres principios: 1º. Consideran que la capacidad mental de los españoles es similar a la del Chimpancé común, y claro, no se les podía decir la verdad, no vaya a ser que se hagan pipí en la cama. 2º Llevan años mintiendo como bellacos y, total, una mentirijilla más que importa. 3º Son una panda de inéptos e incapaces. Aunque… bien pensado, nos inclinamos por las tres en su conjunto.
Y no es que seamos mal pensados, pero las palabras de Solbes, dichas con tonito y actitudes de abuelo Cebolleta, no ayudan a tranquilizarnos: “…¿Controles sobre el destino del dinero que tenemos pensado invertir en el plan de recuperación?... ¡anda coño! ¿y para qué?”
Pues parece claro que los más negros augurios se van a cumplir. Ya no podemos ir despidiendo de algunas especies de invertebrados, tales como la símpática langosta, la escurridiza angula o la sorprendente ostra.
Adios, querido cerdo patanegra. Bon voyage esturión beluga. Millones de años juntos para acabar en la barriga de cuatro listos.